Existen un montón de recetas.Y todas ellas muy diferentes en cuanto a los ingredientes que le ponen.Las hay en la que ponen huevo a la masa (yo no le pongo porque sino mas que una leche frita estaríamos hablando de crema frita) y en otras muchas usan harina de trigo en vez de fécula de maíz ( para mi gusto queda mucho mas fina con fécula de maíz y así los celíacos pueden disfrutar de ella). Luego están en las que ponen vainilla o canela y limón. Yo suelo poner limón y canela,que es como toda la vida lo he visto) pero he probado en poner una vaina de vainilla abierta en la leche y queda también muy rica y original al verse luego los puntitos de las semillas.
Pero como para todo hay gusto y en la cocina de lo que se trata es de innovar...
Yo he decido hacer la de toda la vida...
Ingredientes para unas 4 o 6 porciones
- 500 ml de leche
- 100 g de azúcar
- 40 gr de fécula de maíz (Maizena)
- la cáscara de medio limón
- 1/2 rama de canela
- harina para rebozar
- 1 huevo para rebozar
- aceite para freír
- azúcar y canela en polvo para espolvorear
Untar una bandeja de aproximadamente 2 cm con mantequilla y espolvorear con azúcar glass y reservarla para verter la crema una vez la hayamos preparado.
Ponemos las mitad de la leche en una cazuela junto con la piel de limón y la canela en rama y lo ponemos al fuego hasta justo vaya a romper a hervir que la retiraremos. Y dejamos que se infusione un rato.
Mientras tanto disolvemos la fécula de maíz en la leche que habíamos reservado (recuerda que la fécula de maíz hay que disolverla en un líquido frío,que en este caso es leche) y lo mezclamos muy bien hasta que no quede ningún grumo. Le añadimos el azúcar y luego le pondremos la leche infusionada pero colándola para quitar la piel de limón y la canela. Lo revolvemos bien y lo ponemos a cocer en una cazuela,a fuego medio-bajo y sin dejar de remover con unas varillas tanto por el fondo como las paredes de la cazuela para que no se nos pegue. Y lo dejamos cocer hasta que se vaya espesando. Es mejor cocerlo poco a poco para que la harina se cueza y no nos deje un sabor a crudo. Aproximadamente se tarda unos 20 minutos. Cuando la leche haya espesado lo suficiente lo volcamos en la bandeja que habíamos preparado antes. Hay que dejarla enfriar lo mas que se pueda. Yo normalmente la suelo dejar unas 6 horas. Porque como hay que cortarla en cuadraditos,cuanto mas fría esté mucho mejor.
Una vez fría,las cortamos en cuadraditos,las rebozamos en harina (pero si hay algún celíaco lo rebozamos con harina de maíz -la Maizena de toda la vida - y así también podrá disfrutar)y luego en huevo batido y las freímos en abundante aceite caliente durante 2 minutos mas o menos. Una vez fritas las pasamos a un papel absorbente para que se vaya el exceso de aceite. Y,por último,las rebozamos con la mezcla de canela y azúcar. Y a comerrr!!!! Calientes,frías,templadas....están riquísimas!!!